miércoles, 12 de marzo de 2014

CONOCIENDO LEÓN… Y SU BELLEZA

Día 12, miércoles.

La Madre ha podido visitar hoy el santuario de la Virgen del Camino, titular de nuestra Inspectoría de León. Un dominico, le ha explicado el origen e historia del Santuario y  la devoción del pueblo leonés a esta imagen de la Virgen dolorosa que, a los pies del camino de Santiago a su paso por León, sostiene el camino de la fe de todo aquel que la invoca.

El pueblo de León la invoca con devoción y acostumbra a besar y tirar de su manto como los hijos pequeños tiran del vestido de su madre para ser atendidos. S. Yvonne también ha asumido el sentido de ese gesto y a su protección materna ha confiado nuestra Inspectoría.

Por la tarde ha podido también disfrutar de la  belleza de la catedral gótica de León con sus hermosas vidrieras, y sus alrededores. Visita guiada por Mª Ángeles López Chana, profesora del Centro “Mª Auxiliadora” de León, que con su saber ha hecho gustar a la Madre sus detalles e historia.

 

¡SOMOS HERMANOS Y HERMANAS DE VERDAD!

Día 12, miércoles. Sobremesa compartida de la comunidad FMA de la Casa Inspectorial con el vicario inspectorial de León y los directores de las casas SDB de León


La Madre, a su llegada a la Casa Inspectorial de León,  ha compartido la comida con la comunidad a la que también se han unido, D. Eusebio Martínez, Vicario Inspectorial y los directores de las tres comunidades de salesianos de la ciudad, Juanjo Ruiz, Rafa Castro y Eleuterio Lobato.

Tras una fraterna sobremesa D. Eusebio,  en nombre de todos los salesianos de la Inspectoría “Santiago el Mayor” de León,  ha hecho entrega a S. Yvonne de una figura de Don Bosco Sabedor de que  los superiores son siempre signo de unidad, la presencia de S. Yvonne –aseguró D. Eusebio -nos remite al que es el punto de unidad de toda la Familia Salesiana, Don Bosco”.  No han faltado palabras de alegría y agradecimiento.

El encuentro ha concluido con las palabras de la Madre dirigidas a los hermanos salesianos presentes:

“Gracias por haber pensado compartir el almuerzo juntos. Me da mucha alegría  constatar que hay mucha fraternidad y mucha unión entre nuestros hermanos y nosotras. Don Bosco nos une... ¡claro, tenemos el mismo fundador! El mismo espíritu… ¡Somos hermanos y hermanas de verdad!

Más allá de todo lo que podemos hacer o no juntos, vivir esta fraternidad  es un signo muy grande para los jóvenes, ellos necesitan vernos unidos y en comunión. Siempre es fecundo en la misión. Os deseo que sigáis construyendo este hogar con ese espíritu de familia, y que el Señor y Mª Auxiliadora sostenga a todos; también a vosotros en este cambio que llega con la unificación, puede ser positivo y constructivo y nos anima también a nosotras… En la oración, que el Señor nos sostenga siempre. Cada vez más en nuestra misión  educativa podemos dar un testimonio profético desde este mismo espíritu, desde esta nuestra relación de comunión y de fraternidad al tiempo que cada es cada uno, y eso mismo nos enriquece, el dialogar y poner en común nuestra riqueza.  Yo soy feliz de vivir este momento, le diré al Inspector que le han representado ¡muy bien!.

Que esa alegría pueda ser contagiosa para toda la gente, los jóvenes joven sobre todo,  las familias… hoy se necesita. La carta de Identidad nos habla de alegría, es un signo que la Familia Salesiana está llamada a dar, que juntos podamos hacer crecer todos los grupos de la familia salesiana para que así el carisma siga desarrollándose poniendo los colores, como Don Bosco nos encomendó. Muchas gracias”

SIEMPRE HAY UN LUGAR PARA UN AMIGO

Día 12, miércoles. Conociendo a los alumnos del colegio "Mª Auxiliadora" de Lugo.


En la mañana del 12 de marzo, Madre Yvonne se ha encontrado con los alumnos de Secundaria de nuestra casa de Lugo. Una alumna de 4º curso, Xiana González, ha saludado a la Madre en nombre de sus compañeros y cuatro alumnas han interpretado una danza gallega marinera.

La madre ha agradecido la acogida cariñosa y ha dado los “Buenos días” a los muchachos. Destacamos alguna de las ideas de su saludo.  

-        La paz del mundo empieza en el corazón de cada uno de vosotros cuando sabemos dialogar, aceptar la diferencia que nos enriquece.  

-        El secreto de la felicidad está en hacer felices a los demás. No tengáis miedo de comunicar a los demás quién es Jesús.

-        El sentido de la vida de las hermanas y de vuestros profesores sois vosotros.

-        En esta casa podéis encontrar a Jesús como amigo. ¡Acoged a Jesús! Hablad con Él, escuchad su Palabra; contad con Él que Él cuenta con vosotros.

Se ha despedido de todos en francés: “Soy muy feliz por haberos conocido”.

Después se ha dirigido al piso de primaria. Tras el saludo leído por una alumna, le han cantado con fuerza: un nuevo sitio disponed para un amigo más”… Y realmente hacia falta apretarse un poco en el pasillo repleto de chiquillos. Madre Yvonne les ha dicho que estaba feliz de oírles cantar. Siempre hay lugar para un amigo. Les ha invitado a estudiar con alegría; porque “se consiguen mejores resultados” y les ha puesto “deberes”: hacer feliz cada día a otro amigo…

Los alumnos le han entregado una casita de chocolate y la Madre ha recorrido el pasillo, saludando especialmente a los profesores.

La siguiente parada ha sido el aula de educación especial. Allí le esperaban los niños y sus educadoras, que le habían preparado una original coreografía para decirle: ¡Bienvenida a tu casa! No faltaron los regalos hechos por ellos.

Mientras, los alumnos de Infantil ya estaban preparados en la portería. También ellos le leyeron su saludo y le cantaron diciendo que todos eran amigos de Jesús. Uno de ellos le regaló un bollo que había hecho su mamá, otro llevaba la cámara de fotos, porque sus padres le habían dicho que se tenía que hacer una con la superiora general. Y también le entregaron un bonito ramo de flores pintadas por ellos. Madre Yvonne siguió agradeciendo tantas muestras de cariño. Las piruletas no faltaron en ninguna de las etapas.

Y llegó el momento de la despedida. En la portería estaban miembros del personal de administración y servicio, padres de alumnos, ADMA y Salesianos Cooperadores, junto con las hermanas, que le han ofrecido un donativo. ¡Me voy muy contenta! ¡He visto un ambiente realmente salesiano y eso es fruto de la sinergia de todos! Me dicen que aquí se ve poco el sol, pues de esa sinergia nacen en esta casa los rayos que ¡iluminan la ciudad!

Al son de la gaita nos hemos dicho adiós. ¡Gracias Madre! ¡Te esperamos, vuelve muy pronto!

EN EL CORAZÓN DE LA CASA

     Día 11, martes.  Noche de convivencia con las hermanas de Lugo

 

A las 22,30h del 11 de marzo Madre Yvonne entra por la puerta de nuestra casa. Todo está preparado para la cena, que compartimos en un ambiente de familiaridad y sencillez. A continuación tenemos una sencilla sobremesa, en la que Carmen Riguera, animadora de la comunidad le dirige un saludo en nombre de todas las hermanas. Sor Consuelo Martínez lee los versos de León Felipe: “Ser en la vida romero…” y se proyecta un vídeo –montaje con imágenes de la vida en nuestra comunidad educativa, al tiempo que le cantamos, versionando una canción de Ana Kiro, artista gallega muy popular:

Hola. ¿Qué tal? Madre Yvonne, ¿cómo estás?

Yo presiento que esta noche va a ser algo grande y sensacional.

Sabes muy bien, Te queremos de verdad.

Yo, ¿qué  quieres que te diga? Estoy muy contenta y quiero cantar.

Gracias por estar aquí, gracias por este calor.

Me siento tan encantada que todos los días  doy gracias a Dios.

Gracias por estar aquí, Gracias desde el corazón.

Tú visitas nuestra casa, te aplaude Galicia con gran ilusión.

Hola, ¿qué tal? yo siento tanta emoción.

Hoy estás entre nosotras y estamos contentas  de escuchar tu voz.

Yo ya no sé cómo hemos de pagar tantos años de cariño, de entrega sincera,

de amor de verdad.

Y se le entrega el regalo de cáliz, patena y vinajeras de Sargadelos. Madre Yvonne  nos da las buenas noches: Nos recuerda que Don Bosco quiso crear una familia; no se puede educar a los jóvenes sin darles una familia. Agradece el cariño que le hemos expresado, es un don que cultivar todos los días. Nuestra comunidad es el corazón de la casa, de ella nace el ambiente de la obra educativa. Hace referencia a la experiencia de “las noches abiertas” que le  hemos contado en la cena. Lo ve muy significativa y nos felicita. “Un día dará su fruto- nos dice- que los adolescentes vengan a compartir una noche con nosotras es signo de que vivimos la acogida, la apertura. Así se experimenta la alegría de ser familia, y eso va a ser fecundo. Es muestra también de que esto es un clima habitual, estas cosas no se improvisan”. Agradece también la alegre sobremesa y el clima comunitario que mostramos, es un signo de esperanza.  Por  último nos recuerda que María no solos e pasea por la casa de Nizza, sino que esa es una realidad que se da en cada casa salesiana. A ella nos encomienda.

Termina un largo día con una breve pero sentida acción de gracias en la capilla. Es muy tarde, pero el corazón rebosa.